martes, 11 de febrero de 2014

EL ENOJO PEQUEÑO QUE SE DESCUIDA

El enojo pequeño que se descuida se convierte en el resentimiento que nos distancia de nuestro hermano para toda la vida.

Puede ser un héroe tanto el que triunfa, como el que fracasa, pero jamás el que abandona el combate.

El esfuerzo termina por dar su recompensa.

Concéntrate en lo que sabes hacer y no te obsesiones con lo que no sabes.

Las verdaderas motivaciones siempre son interiores, las motivaciones externas no siempre son constantes.

Aprende que debes hacer lo mejor, sin esperar nada de los demás. Así tus cosas fluirán tranquilas como el agua.

¡Haz una vida de Amor no un día del Amor!
https://mail.google.com/mail/u/0/images/cleardot.gif